En México, la carga transportada por autotransporte es un indicador clave de la actividad económica y es útil para medir la eficiencia de la economía del país. En 2020, más de la mitad de la carga nacional se distribuyó por medio del autotransporte de carga. En el mismo año, el autotransporte de carga aportó el 3.3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y dio empleo a casi un millón de personas.
Los más de un millón de vehículos de transporte de carga (con un promedio de antigüedad de las unidades de más de 19 años), en más de 190,000 empresas registradas en 2021, tienen un impacto ambiental significativo. Según un estudio del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) más del 25 por ciento de las emisiones de los gases de efecto invernadero y más del 76 por ciento de las emisiones de carbono negro en el sector del autotransporte están relacionados con el autotransporte de carga. Por ello es relevante tomar acciones y capacitar a las personas relacionadas con el transporte de carga para disminuir los aportes de emisiones de este sector.
La capacitación e implementación de medidas de mitigación en este sector representa un reto debido a que el 97 por ciento son micro y pequeñas empresas que concentran más de la mitad de los vehículos de transporte de carga en el país.
Las circunstancias financieras (no contar con capital o acceso a crédito), administrativas (poca disponibilidad de tiempo y recursos humanos) y educativas (carencias de competencias básicas) obstaculizan la búsqueda e inscripción a los servicios de capacitación. Tanto el desconocimiento de beneficios de mejores prácticas y nuevas tecnologías como la falta de programas de incentivos y seguimiento para la mejora continua de personal impiden avanzar con la profesionalización de empresas transportistas.
A continuación presentamos las iniciativas de profesionalización que la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable (GIZ) en México, que trabaja por encargo del Ministerio Federal alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ por sus siglas en alemán) a través del Programa Transporte Sustentable (PTS), ha impulsado en colaboración con actores públicos y privados y que promueven un sector del autotransporte de carga amigable con el medio ambiente y más competitivo.
EducaT es una plataforma en línea operada por la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) que brinda información sistematizada sobre capacitaciones disponibles vinculando empresas transportistas con organizaciones especializadas en formación.
Hasta la fecha, se han publicado 120 cursos de 24 organizaciones y casi 500 usuarios (14 por ciento son mujeres) están registrados en la plataforma.
Para cumplir la brecha entre demanda y oferta, en colaboración con especialistas nacionales e internacionales se elaboraron programas adicionales a las ofertas de cursos existentes. En la etapa piloto, más de 100 empresas transportistas de diferentes tipos y tamaños fueron capacitadas de forma gratuita y se brindó un servicio de seguimiento personalizado para la mejora continua y el monitoreo de impactos.
Se brindó un programa dirigido en particular a Micro, Pequeñas y Medianas empresas (MiPyMEs) que incluyó capacitaciones para mandos medios en gestión de flota, operadores en conducción técnico-económica y seguimiento para el control de combustible. En los cursos prácticos se demostró un ahorro de combustible de hasta 25 por ciento gracias a cambios en conductas de manejo.
En colaboración con la organización no gubernamental holandesa Smart Freight Centre (SFC), más de 50 empresas transportistas en México recibieron apoyo para conocer la metodología GLEC (Global Logistics Emissions Council), que calcula todos los gases de efecto invernadero que se emiten a lo largo de la cadena de suministro multimodal. Con ello se busca fortalecer las capacidades de las empresas, para que de manera interna midan su impacto ambiental y definan acciones para la reducción de ese impacto.
En el marco de este proyecto, de la mano de las especialistas de SFC, algunas empresas participantes también desarrollaron planes de mejora continua para lograr sus objetivos hacia la sustentabilidad. En dichos documentos se definieron medidas cuya implementación les permitió tener ahorros de combustible por tonelada-kilómetro recorrido de hasta el 4.5 por ciento.
Además, en colaboración con el North American Council for Freight Efficiency (NACFE), GIZ México apoyó en una serie de seminarios virtuales sobre mejoras tecnológicas (grabaciones disponibles: [1] ralentí, [2] llantas y sistema de inflado y [3] telemetría) y con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) trabajó en la elaboración del material que forma parte en el diplomado del Distintivo CANACAR sobre eficiencia energética en el autotransporte (hasta la fecha 129 personas pertenecientes a 44 empresas concluyeron el diplomado).
Por otra parte, la capacitación a capacitadores es un elemento clave para luego transmitir el conocimiento a la nueva generación de profesionales. Por ello, en colaboración con los institutos españoles Zaragoza Logistics Center e ITAINNOVA se capacitó a 32 profesores y docentes (19 hombres y 13 mujeres) en las últimas tendencias sustentables e inteligentes en la logística.
Como parte de las actividades finales, las y los docentes elaboraron currículums formativos incorporando temas y herramientas del curso. Como resultado, en 2022 al menos una de las propuestas había sido aprobada como contenido de una maestría en ciencias de ingeniería en una institución educativa.
Estas iniciativas han demostrado el interés y los beneficios de capacitarse y establecer programas de mejora continua para las empresas transportistas. Implementar estrategias de profesionalización al personal constituye un gran potencial para toda la industria hacia un futuro sustentable y competitivo.